lunes, 24 de octubre de 2016

TOC TOC ¡PASEN Y LEAN! LOS LIBROS NO MUERDEN... ¿O SÍ...?




HALLOWEEN Y SUS HISTORIAS DE TERROR SE HAN COLADO EN NUESTRA BIBILIOTECA. ¿TE ASOMAS  A LEERLAS?

EN NUESTROS FONDOS PODRÁS ENCONTRAR LIBROS DE GÉNEROS Y TEMÁTICAS RELACIONADOS CON ESTE DÍA TAN SEÑALADO EN NUESTRO CALENDARIO. 

PARA EMPEZAR, NUESTROS ALUMNOS/AS DE 1º Y 2º ESO HAN CREADO SUS PROPIAS HISTORIAS...¡SON PARA MORIRSE DE MIEDO!

  





RELATOS DE 1º ESO 

El fantasma del castillo

Una noche de Halloween fuimos a pedir caramelos por todo el pueblo.
Al llenar una calabaza entera fuimos a mi casa para vaciarla y al volver de vaciar las calabazas fuimos a pedir más caramelos. Al volver decidimos ir al castillo del marqués.
Al entrar no se veía nada, y de repente se encendieron unas velas y en el sótano se escuchaban unos golpes. Al bajar abrimos la puerta y salieron montones de murciélagos. Al entrar se cerró  la puerta y se apagaron las luces. Pensábamos que nos habíamos quedado encerrados para siempre, pero un policía que pasaba por allí nos abrió la puerta.
Al salir del castillo vi  al marques mirar por la ventana…

Escrito por Dani

 

Una casa de terror

En el siglo XX se construyó una casa muy bonita y grande. Se vendió por $2000 y durante la construcción murieron 15 personas. Nadie sabe cómo simplemente los cuerpos de los trabajadores se encontraban en diferentes partes de la casa. El vendedor no le dijo a los compradores nada de eso; los compradores eran un joven y bonito matrimonio. Cuando se mudaron empezaron a notar cosas raras. Al principio de la sexta noche se escuchaban sonidos leves, después golpes, y al último pasos. El matrimonio solo duró 1 mes con la casa ya que no aguantaron más, y se fueron de la noche a la mañana.
La casa quedó abandonada. Durante un tiempo hubo rumores del matrimonio, cosas como:
-yo escuché que ellos practicaban brujería.
-yo escuché que lo que les pasó  era una maldición de los que murieron en la construcción.
Cosas como esas
Nadie sabía que pensar que con el paso del tiempo la historia se fue olvidando, la casa se fue descuidando poco a poco. Pero una noche volvió a surgir la historia. A las 3:00 a.m se escucharon golpes fuertes, como si arrastraran un cuerpo, luego pasos, gritos y tablones que se caíann. Estuvieron así las cosas hasta que un día una mujer se mudó a esa casa. Muchas personas se lo advirtieron pero no hizo caso. Los vecinos se acercaron a ella, esa chica era muy bonita, era rubia, ojos azules, era la envidia de todas las mujeres.
La primera noche fue tranquila, sin ruidos, golpes, nada… fue bastante raro, era como si esa chica lo tranquilizara todo, de algún modo.
Estuvo así por un buen tiempo. Todo fue extraño, pero como dije por un tiempo, ya que pasaron los días, las semanas y los vecinos notaron que no salía, así que tocaron a la puerta y ésta se abrió sola, entraron y…

Escrito por Brenda

 Emily wants to play

Érase una vez una chica llamada Emily, ella tenía 9 años, era una chica “normal”, con una casa “normal”, una familia “normal”, y un hogar “normal”. El único “defecto” que tenía esa familia es que eran pobres, hasta que un día… Llamaron a la puerta.
-¡Voy!- Exclamó María. (La madre de Emily)
Era un hombre que vendía cupones. María no quiso comprarlo, porque no tenía dinero, sin embargo, él decidió regalarle uno.
Unas pocas semanas después, llegó la hora de comprobar el cupón y resulta que… ¡Habían ganado un millón de euros! Ese iba a ser el mejor día para Emily y sus padres.
Al día siguiente, ellos fueron a buscar una casa en condiciones b, y encontraron una casa enorme, llena de habitaciones que costaba alrededor de 400 mil euros. Cuando terminaron de verla, automáticamente la compraron. A continuación hicieron la mudanza. Ya podrían apuntar a Emily a un buen colegio. Y comprarle ropa. Emily era muy buena estudiante y se portaba bien. Al cabo de dos años aproximadamente, volvieron a mudarse porque al padre de Emily le había salido trabajo en el extranjero. Al principio todo era normal, hasta que un día Emily, se encontró una caja con tres muñecos en el armario del cuarto de sus padres  (eran: un payaso que se llamaba Mr. Tatters, un muñeco normal con un traje que se llamaba Chester y una muñeca que se llamaba Kiki).
Una noche María y su esposo ( se llamaba Mario), se la encontraron de pie, al lado de su cama mirándolos fijamente. Ellos se asustaron mucho y después del susto la mandaron a la cama. Esto sucedió unas nueve o diez noches más o menos. Los padres cada noche se asustaban más.
Ellos empezaron a notar cambios en la conducta de Emily, y veían cómo Emily suspendía una y otra vez. También empezaron a  notar que Emily hablaba con los muñecos, “cosas de niños, pensaron”. Ellos intentaron separar a Emily de los muñecos, pero ella no quería. Un día los padres decidieron crear un pasadizo secreto que llevara al sótano, para encerrar a Emily con sus muñecos allí, por temor a que les hiciera daño.
Le llevaban comida y bebida a diario. Un día, cuando bajaron para darle la comida, y se la encontraron muerta, por un momento pensaron en llamar a la policía, pero, qué les dirían, que habían encerrado en el sótano por miedo a que les hiciera daño, no, no, no. Volvieron a guardar, los muñecos en la caja del armario. Al poco tiempo empezaron a escuchar ruidos extraños en la casa, y a notar presencias extrañas. Después veían cómo los muñecos se movían solos, y aparecían y desaparecían así porque sí, pero antes de llegar o irse, siempre apagaban las luces para que no vieran como se movían. Un tiempo 8largo9 después se encontraron a los padres muertos en la casa (sin ninguna herida visible) y un túnel por el cual se llegaba al sótano (ahí estaba la habitación de Emily). Ellos vieron los restos de Emily (también sin ninguna herida visible). La casa se la quedó el ayuntamiento.

Escrito por Susana

La casa encantada 
 

Una  tarde, en Halloween, mis amigos y yo salimos a pedir caramelos por todas las casas. Estuvimos toda la tarde. A la noche, fuimos a comer a un bar. Cuando terminamos, salimos otra vez a pedir caramelos y divertirnos.

Llegamos a una casa, llamamos, pero nadie nos abría. Al minuto de llamar, la puerta se abrió sola y nosotros entramos. Estaba todo oscuro. Brenda y Jaime dijeron que en esa casa no había nadie, que antes vivía una mujer pero falleció y ya no había vivido nadie. Susana y yo les dijimos que daba un poco de miedo pero íbamos a entrar a ver lo que había dentro. Entramos y nos fuimos al fondo, solo había una televisión vieja y un mueble con varios cuadros. Brenda encendió la  vela que tenia. Vimos que había unas escaleras y no nos importó subir.

Llegamos arriba y la vela se apagó. Susana encendió la suya porque a Brenda se le había gastado. Había una habitación muy grande donde había una ventana, una cama, un armario y una mecedora. Yo me fui para la puerta y vi que había un interruptor, y avisé a todos. Le di y se encendió la luz, pero se apagó. Así estuvo un rato. Cuando se apagaba, aparecía algo blanco y cuando se encendía, no aparecía nada. Cada vez se iba acercando a nosotros y, la última vez, salimos corriendo y cerramos la puerta. Estábamos todos muy asustados pero, al fin y al cabo, lo pasamos muy bien ese día tan miedoso.  

  Escrito por Conchi

La noche de horror 

 Era una noche de Halloween y estábamos vistiéndonos de fantasmas. Íbamos a ir por las casas a pedir caramelos. Pedimos en unas casas que daban mucho miedo: pedimos en una casa con las ventanas rotas  y  entramos a ver lo que había pero no había nada nada más que muebles viejos y rotos…y silencio. No había nadie. Estaba abandonada. Fuimos a pedir a otra casa para comer golosinas y nos abrió una mujer y nos dio   muchas  golosinas. Nos dimos una vuelta por el pueblo y  fuimos a  mi casa a cambiarnos.  Fuimos a cenar todos junto:  Dani, Francisco,  Sergio y yo. Después vimos una película de suspense y nos dio mucho miedo. Contamos una historia de un castillo que  estaba abandonado. Al rato vinieron sus madres y se fueron.

Escrito por Víctor

La noche de miedo 

Salí por la noche de Halloween y me encontré un hombre lobo mirándome con ganas de comerme .Salí a correr y él me persiguió hasta el cementerio. Me metí y él subió por la pared, me arañó y me arrancó  la camiseta. Empecé a echar sangre, salí y tropecé .Me hice una brecha .Me levanté, me perseguía un zombi junto con el hombre lobo .El zombi me pegó un puñetazo y me arrancó dos dientes y de repente me cogió una silueta muy fuerte ¡Era Frankestein! Que le arrancó la cabeza al zombi y se la tiró al hombre lobo .Frankestein le pegó un puñetazo al hombre lobo y lo estampó contra el muro .Lo cogió por el cuello y lo colgó con una soga y lo ahorcó .Y la calma y el silencio volvieron en la noche de Halloween. 

Escrito por Francisco
 

  La última noche

Hace unos años, una tarde de Halloween. En unos viejos barrios de Manhattan (Nueva York), un grupo de niños llamados María, Miguel y Luna de 14 años decidieron ir ese año al cementerio más viejo de la ciudad.
Ese año salieron muchos niños a pedir chuches, pero ellos decidieron hacer eso porque creían que no iban a tener miedo. Cuando llegaron vieron como era el lugar: viejo con muchos años estropeados, se oían muchos ruidos extraños…
María: ¡Venga que no va a pasar nada!
Miguel: ¿Se-se-segura?
María se atrevió a saltar la reja y entrar pero en cuanto dio dos pasos se asusto muchísimo y volvió
María: Entremos todos juntos.
Miguel: David si entras tú entro yo. (Afirmo)
Todos entraron juntos, pero Luna se asustó muchísimo y decidido no continuar.
Luna: Chicos, no puedo, tengo mucho miedo.
Pero no le echaron cuenta y tuvo que seguir. De repente una sombra se puso delante de ellos, miraron hacia atrás y vieron un horrible fantasma. Era blanco, como de un metro y daba muchísimo miedo. Cada vez empezaban a aparecer más fantasmas, espíritus, ruidos…Salieron corriendo pero unos fantasmas les impedían salir, Luna empezó a llorar.
Fantasmas: ¿¡Por qué estáis aquí!?
Niños: Hemos venido a-a-a ver cómo era el cementerio.
Fantasmas: ¡Vosotros nos habéis molestado y ahora lo vais a pagar!
Empezaron a hacerle trampas, ruidos, sustos…Hasta que por fin pudieron salir, salieron corriendo y del susto jamás volvieron  ni a pedir chuches en la noche de Halloween.
Lunas y Miguel estuvieron un tiempo que ni siquiera podían dormir solos en su cama y el cementerio fue precintado por una banda alrededor  que decía: Prohibido pasar.

Escrito por Mara

 

 Me persigue un payaso

Un día  iba paseando por una avenida de Irlanda, y de repente me di cuenta que tenía una carta en  mi bolso, la leí y era una amenaza de un payaso , de repente escuche una voz maléfica , cogí un atajo hasta mi casa para llegar lo más rápido posible , cuando me di cuenta me estaba persiguiendo, entre a mi casa cerré las ventanas y las puertas solo  me quedaba una por cerrar cuando empezó a llamar a la puerta , cogí mi teléfono y Salí  a enfrentarme contra él , salí corriendo detrás del hasta que él se paró , entonces llame a la policía pero tenía muy poca y de repente se me apago  de repente se me ocurrió esconderme para que no me viera  , cuando se fue llame a la policía , y ya lo encarcelaron era un asesino que hace tiempo salió de la cárcel yo no fui la única persona , algunas personas lo pasaron peor.
  Realizado por Mirella


Charlie el enterrador

Una  fría  noche de  Halloweeen   salí  con  mis  amigos  y  fuimos   a un descampado  a  contar  lo  que  más  miedo  nos  diese . Mi amigo Paco  dijo  que le  daban  miedo  los  perros y a  mi   amigo  Jesús  le  daban  miedo  los  zombis. No  se  nos  ocurría  nada  más  y  yo  les  dije  que  seguro  que  les  daba  miedo  entrar  al  cementerio  de  noche  y  dijeron que sí. Decidimos  ir  para  afrontar  nuestros  miedos. 
         Entramos  y  se escuchaba un ruido  chirriante. Corrimos asustados, pero  la  puerta  estaba  cerrada. A  Paco  le  dio  una  pala  en  la  cabeza  y  lo  mató. Vimos  a  un  hombre  que  nos  dijo "soy  Charlie"  y  tiró  de  nuevo  la  pala . Apareció  Trevor, el  guarda del  cementerio  y  con  una  escopeta  mató  a  Charlie.

Al  día  siguiente  fuimos  al  funeral  de  Paco.

  Realizado por Sergio

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